

Lo más novedoso del Sistema, que se ha comenzado a comercializar este año, es que utiliza estímulos acústicos tridimensionales para guiar al usuario por rutas que no conoce, sin mirar el smartphone, empleando GPS y realidad acústica aumentada. La materia que emplea son unos auriculares de transmisión ósea que se apoyan en los huesos del cráneo y transmiten chasquidos al oído interno a través de vibraciones internas. Los oídos del usuario siguen libres ya que el reflejo tiene menor carga cognitiva.
¿Cómo nació esta idea? Metodología simple, similar a algunas de nuestras técnicas imita: Rafael se sentó en su salón, le dió a su mujer una campanita del árbol de Navidad, cerró los ojos y comenzó a moverse siguiendo el sonido. Son Ideas en tres dimensiones, como las que nos cuenta Julio de la Torre en su programa en 3D de la Radio de la Universidad de Salamanca.
Además, según la investigadora Rosa Navarro, Valdés usó algo muy novedoso en la tecnología actual, la encriptación, con el propósito de guardar su nombre en el título de la obra para deleite de ojos sagaces. Su firma la formarían la tres primeras letras, leídas en sentido inverso (como el texto hebreo según su origen), unidas a las tres últimas.
En imita, desde la humildad, somos tus lazarillos para innovar. Como el perro fiel, enseñamos a nuestros clientes a cruzar las calles. Pero, una vez la empresa está lista para innovar, nos convertimos en el ciego que da de comer o busca el alimento para su amigo leal, les paseamos, les cepillamos y, sobre todo, conversamos con ellos para guiarles e indicarles el momento en el que se tienen que sentar, tumbarse o ponerse erguidos.
Los profesionales de imita somos como el escudero del pícaro Lazarillo, por el que siente curiosidad, le produce novedad, lo plantea como enigma. Este personaje es realmente innovador. Es la primera vez en la Historia de la Literatura que el personaje le pregunta al protagonista por su vida, le hace sentirse superior, le hace mejorar. Renueva su vida y le hace verse a sí mismo especial al alejarle de su propia miseria. Rompe con lo que hacía habitualmente, le interpela para que tenga un combate interior y esta batalla que Lázaro libra, le acaba por demostrar su verdadero talento. El escudero es un auténtico coach emocional.
Aprendamos a innovar como Lázaro, nacido en nuestro rio Tormes, quien mediante un juego implícito de confianza con el ciego, le enseña tres lecciones: la primera sucede cuando le invita a escuchar unos magníficos sonidos provenientes del interior de un toro de piedra de la época romana . En el momento en que Lázaro pone la oreja allí, el anciano le da con el garrote para indicarle que ese no es el camino y que no debe fiarse de lo que hacen los demás y sí pararse a pensar antes de actuar.
La segunda lección, proviene de la picardía de Lázaro al robar la comida del fardel del ciego, que cosía y descosía: eso es innovar. Agudizó el ingenio para sacar las más brillantes ideas y las más astutas mentiras con el fin de aprovecharse de los despistes de su amo y, con ello, comenzó a valerse por sí mismo.
Pero, sin lugar a dudas, la lección más importante que extraemos de las fortunas y adversidades del protagonista de la obra, es que, en la vida, podemos elegir ser ciegos o lazarillos, conservadores o innovadores, seguidores o líderes, pero siempre es posible adoptar una actitud abierta para despojarnos de la venda que nos impide contemplar el mundo desde el telescopio de la Innovación.
«Toma, come, triunfa, que para ti es el mundo. Mejor vida tienes que el Papa.». – Lazarillo de Tormes.